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Papa al horno: la receta perfecta en 5 pasos

Si estás buscando una receta fácil y deliciosa para cocinar papas al horno, entonces estás en el lugar correcto. Esta receta es perfecta para cualquier ocasión, desde una cena familiar hasta una comida rápida y saludable. Además, con solo 5 pasos, podrás cocinar papas al horno como un chef experto.

Paso 1: Selecciona las papas adecuadas

Lo primero que debes hacer es seleccionar las papas adecuadas para cocinar al horno. Las mejores papas para asar son las papas rojas o las papas russet, ya que tienen una textura firme y se mantienen intactas mientras se cocinan. Asegúrate de elegir papas del mismo tamaño para que se cocinen uniformemente.

Paso 2: Lava y corta las papas

Una vez que hayas seleccionado las papas adecuadas, lávalas bien y sécalas con una toalla de papel. Luego, córtalas en rodajas finas o en cuartos, dependiendo del tamaño de las papas. Si prefieres, también puedes dejar las papas enteras, pero asegúrate de hacer varios cortes en la parte superior de cada papa para que se cocinen por dentro.

Paso 3: Agrega los condimentos

Para darle sabor a tus papas, agrega tus condimentos favoritos. Puedes utilizar una mezcla de hierbas secas como romero, tomillo y orégano, o simplemente sal y pimienta. También puedes añadir ajo picado, cebolla, queso rallado o tocino para darle un toque extra de sabor. Mezcla los condimentos con un poco de aceite de oliva y luego vierte la mezcla sobre las papas, asegurándote de que cada papa esté cubierta con la mezcla de condimentos.

Paso 4: Coloca las papas en el horno

Una vez que hayas agregado los condimentos a las papas, es hora de colocarlas en el horno. Precalienta el horno a 200 grados Celsius y coloca las papas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Si prefieres, también puedes colocar las papas directamente en la rejilla del horno. Asegúrate de dejar suficiente espacio entre cada papa para que se cocinen uniformemente.

Paso 5: Hornea y disfruta

Por último, hornea las papas durante aproximadamente 30-40 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes por fuera y suaves por dentro. Una vez que estén listas, retira las papas del horno y sírvelas calientes. Puedes servirlas como guarnición con tu plato principal favorito o como un aperitivo saludable.

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