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Desmontaje cristal horno Balay: ¡Aprende cómo hacerlo fácilmente!

Si eres como yo, que ama la cocina, sabes lo importante que es tener un horno en perfecto estado para cocinar tus recetas favoritas. Pero, ¿qué pasa cuando se rompe el cristal del horno? ¿Cómo se desmonta y se reemplaza? En este artículo, te enseñaré cómo desmontar el cristal del horno Balay de manera fácil y rápida.

¿Por qué es importante desmontar el cristal del horno?

Desmontar el cristal del horno es importante si necesitas reemplazarlo por uno nuevo o si necesitas limpiarlo en profundidad. Un cristal roto puede ser peligroso para tu seguridad y la de tu familia, así que es importante solucionar el problema lo antes posible.

¿Qué necesitas para desmontar el cristal del horno Balay?

Antes de comenzar, asegúrate de tener los siguientes elementos:

  • Destornillador
  • Cinta adhesiva
  • Trapito o paño
  • Cristal nuevo (si es necesario)

Pasos para desmontar el cristal del horno Balay

Paso 1: Prepara el horno

Lo primero que debes hacer es desenchufar el horno de la corriente eléctrica. Luego, retira las rejillas y la puerta del horno y colócalas sobre una superficie plana y segura. Cubre el suelo con un trapito o paño para evitar que se raye o manche.

Paso 2: Desmonta los tornillos

Con la ayuda del destornillador, desmonta los tornillos que sujetan el cristal del horno. Coloca los tornillos en un lugar seguro para que no los pierdas.

Paso 3: Retira el cristal del horno

Con cuidado, retira el cristal del horno y colócalo sobre una superficie plana y segura. Si el cristal está roto, asegúrate de manejarlo con mucho cuidado para evitar cortaduras.

Paso 4: Limpia el cristal del horno

Si solo necesitas limpiar el cristal del horno, utiliza un limpiador de hornos o una mezcla de agua y vinagre para eliminar la suciedad y las manchas. Frota suavemente con una esponja no abrasiva y seca con un paño limpio y seco.

Paso 5: Reemplaza el cristal del horno

Si necesitas reemplazar el cristal del horno, coloca el cristal nuevo en su lugar y sujétalo con los tornillos que previamente retiraste. Asegúrate de que los tornillos estén bien ajustados para evitar movimientos innecesarios del cristal.

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